Tras la noticia a cerca del impago de la nómina del mes de septiembre a todos los interinos de Ceuta, la Asociación Plataforma de Interinos Docentes de Ceuta (PIDOCE), manifiesta su malestar y asombro por cómo se están gestionando las cuestiones educativas desde hace meses.

Para la asociación esta “incidencia” sobre el retraso de la nómina es incomprensible, aludir a “problemas técnicos” es una afirmación “demasiado genérica y con poco fundamento”, para explicarle a más de 300 afectados que no cobrarán su mensualidad y que en ningún momento se llega comunicar de manera oficial a los afectados.

También, por un lado, se usa como justificación el hecho de que el día 2 de septiembre fue festivo lo cual retrasó los nombramientos de los funcionarios interinos por parte de Delegación del Gobierno y por otro, en Hacienda se opusieron a que los trámites pertinentes sobrepasaran el día 5, cayendo además en este mes en sábado.

Estupor es lo que les causa a PIDOCE ver lo que está pasando en Ceuta cuando en Melilla los interinos sí que cobrado, tras haber estado muchos años mirando a Ceuta por estar cobrando con un mes de retraso.

Para la Plataforma denota una falta de empatía, de organización y de previsión de las Administraciones responsables, por solucionar un trámite que repercute en 300 trabajadores públicos, cuando en la situación actual demuestran su máxima profesionalidad y entrega, aun así, con el malestar de que no se vea su trabajo reconocido.

De “Atropello”, así lo califica PIDOCE el que no se pusiera sobre aviso a los afectados, permitiéndoles organizar su economía sabiendo de antemano que no cobrarían hasta finales de octubre, por lo que para la Plataforma es muy decepcionante e incomprensible ver que la Administración que es la que debe velar por los derechos de los trabajadores, sea la que precisamente les causa este agravio.

Por ello, la Asociación PIDOCE manifiesta:

“Su rotunda disconformidad ante lo sucedido y solicita que la Administración ponga en marcha todos los mecanismos necesarios para que este despropósito no vuelva a suceder el curso que viene y que se aclaren los hechos acaecidos para que los derechos fundamentales de los trabajadores no sean agravados por futuras posibles negligencias”.