Sobre las 2:15 horas de la madrugada del día 19, un vehículo que bajaba por la Avenida de Otero a la altura de Villacapona como vulgarmente se conoce, perdió el control del mismo arrancando cinco bolardos de cuajo y quedando centrado en la vía pública mirando en dirección hacia arriba.  En ese momento el suelo no estaba muy mojado

En el accidente no hay que lamentar víctimas las cuales salieron por su propio pie del interior del vehículo, cuando de este y del capo salía un poco de humo, que debió de ser propiciado al saltarle los airbag.

El milagro de la noche ha sido que no circulaba ningún peatón por la acera estrecha de subida pegada al cuartel de la ULOG, no había tráfico en ese momento, aparte de no haber colisionado contra los vehículos aparcados en la subida, por lo que los ocupantes no sufrieron daños.

Hay que reconocer la rapidez con que se presentaron efectivos de la Policía Local desde que se dio aviso al 112, que no llego al minuto.

En esta zona y en el mismo sitio un vehículo entro por el muro del cuartel, en otra ocasión y ocurrió un accidente de características parecidas, y recientemente en la misma entrada de los pabellones militares otro. Esta zona es un peligro debido a la velocidad que circulan los vehículos y las motos, por lo que una representación de vecinos va a solicitar que se pongan badenes.

En la mañana de hoy, bajo una intensa lluvia, se están llevando a cabo trabajos de reparación de la vía pública.