La empresa TRAGSA, ha desmantelado unos asentamientos ilegales en las zonas de García Aldave, Monte Hacho y el CETI.

Según informa la Consejería de Servicios Urbanos y Patrimonio Natural, a través de la empresa, de cada emplazamiento, ha retirado el equivalente a 20 camiones de residuos y escombros.

Las cabañas, chamizos …, componían estos vivacs de supervivencia, con todo tipo de enseres domésticos, para hacer vida.

Las brigadas de la citada empresa, han procedido a la limpieza y adecentamiento de la zona de los acantonamientos, bajo la protección de la Guardia Civil.

Esto ya es un tema muy antiguo que, tirando de la maldita hemeroteca, nos podemos remontar al 2015, donde los migrantes malvivían en la barriada Postigo, con el consiguiente miedo de sus vecinos, a que se pudiese declarar un incendio en esa zona.

También en el monte Hacho en 2016, en este último, para estar cerca de la Planta de Transferencia de Residuos con la intención de pasar a la península ocultos en los camiones. Esta arriesgada práctica le costó la vida a un inmigrante al volcar uno de ellos, en los que iba oculto y al final desistieron, abandonando el lugar.