El presidente Juan Vivas considera que la situación de Ceuta sigue siendo insostenible, la ciudad no puede soportar 3.000 de los 12.000 marroquíes, adultos y menores, que entraron en la avalancha del 17M, por ello Vivas manifiesta que:

"Es una situación que debe ser resuelta cuanto antes por el Estado, que se traduce en una apelación constante e insistente para que se le dé una solución inmediata al problema".

Asimismo, el presidente de la Ciudad es partidario de la eliminación de la excepción de Ceuta al Tratado de Schengen:

"Es trascendental para garantizar un futuro de Ceuta más sólido, estable y seguro, más cerca de España y de Europa”.

La inclusión de Ceuta y Melilla en el espacio Schengen implicaría que los ciudadanos marroquíes residentes en las provincias de Tetuán y Nador tendrían que disponer de un visado para acceder a las dos ciudades autónomas.

El presidente igualmente aboga por una integración en la Unión Aduanera, pero manteniendo la fiscalidad especial de la ciudad.

Juan Vivas ha quedado claro de manera rotunda y sin ambages que:

“Para España, el Gobierno y la UE, Ceuta es España, y que nuestra frontera es la frontera de Europa, y que el respeto a la frontera y a la integridad territorial es básico e innegociable".

El presidente alaba y agradece el comportamiento que está teniendo la sociedad de Ceuta tras el episodio del 17M:

"La categoría, la madurez cívica de la sociedad de Ceuta ha quedado demostrada. No todas las sociedades están preparadas para encajar un golpe tan grave como el que ha recibido la ciudad. Mi sincero reconocimiento a todos los ciudadanos".