Los hechos ocurrieron el pasado día 28 de marzo, sobre las 11:30 horas. Los agentes pertenecientes al Cuerpo Nacional de Policía fueron alertados por el 091 para que se dirigieran al Servicio de Epidemiología del Hospital Universitario, donde se les requería.

Una vez en el lugar se entrevistaron con el doctor que había dado el aviso al 091, quien les manifestó que había asistido al ciudadano C.G.C. de una neumonía, habiendo dado negativo en la prueba de Covid-19, tras lo que se había dado a la fuga de dicho centro médico.

Asimismo, el doctor, les manifestó que debido al estado de salud de esta persona y a su reiterado incumplimiento de las medidas de confinamiento decretadas, podría convertirse en caso de contraer la enfermedad originada por COVID-19 en un grave vector de contagio, por lo que era extremadamente importante que esa persona guardara el confinamiento decretado en el Real Decreto 463/2020 que establece el Estado de Alarma.

Sobre las 12:00 horas, los agentes localizaron a C.G.C en las inmediaciones del Hospital, a quien se informó de la obligatoriedad de regresar a su domicilio y de la prohibición de salir de él, salvo causa justificada.

Los policías le trasladaron a su domicilio, comunicando posteriormente a la Jefatura, los extremos mencionados por el médico, los cuales informaron inmediatamente a la autoridad judicial, la cual ofició, ordenando a la policía la comprobación y cumplimiento del confinamiento y en caso de incumplimiento, se le apercibiese de incurrir en delito de desobediencia o contra la salud pública.

Sobre las 14:05 horas, los agentes actuantes localizaron a esta persona, nuevamente, deambulando en Calle Millán Astray, esquina Calle Pedro de Meneses, mostrándose esquivo ante la presencia de los agentes, por lo que éstos procedieron a su detención como presunto autor de delito de desobediencia y contra la salud pública.

El detenido ha sido puesto a disposición judicial, ordenando el ingreso en prisión, por el Juzgado de Instrucción de Guardia número 2 de esta ciudad.