Esta casa municipal es una ruina

Desde el 17 de marzo CSIF viene reivindicando soluciones que, a día de hoy, no se han querido solventar.

Esta casa municipal es una ruina
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Tras múltiples reivindicaciones, CSIF ha remitido las mismas a varios miembros del Gobierno, también han puesto en conocimiento del Comité de Seguridad y Salud y del Servicio de Prevención, las irregularidades detectadas en las instalaciones del ayuntamiento las cuales afectan, tanto a empleados públicos como a usuarios.

Entre las deficiencias detectadas por el Sindicato, está el estado de los aseos: los dispensadores de jabón si es que hay alguno, están sustituidos por es una botella de plástico de agua de un litro cortada por la mitad y rellena de jabón, la cual, tienes que introducir la mano hasta el fondo para “rebañar” los restos de jabón. La grifería está la mayoría en mal estado o inservible. No hay papel para secarse las manos ni dispensador del mismo. No hay papeleras habilitadas. El papel higiénico está sobre él depósito del wáter. Las duchas están sin difusores, sin mamparas, sin soportes de apoyo, etc…, entre otros, los cuales, no reúnen unas condiciones básicas para ser utilizados con normalidad y sin riesgo en la situación actual. Aseos que todo el mundo ve y durante meses nadie ha querido solucionar.

Según el Sindicato, varios negociados, no cuentan con separador de distancia adecuados para todos los puestos de trabajo ni mostradores, ni se dispone de gel hidroalcoholico para que los ciudadanos, antes de realizar su gestión y hacer uso de documentos y materiales de oficina, puedan desinfectarse las manos.

Además de todo ello, CSIF, reitera la solicitud que a cada usuario que quiera visitar o asistir a algún servicio público, debería tomársele la temperatura antes de entrar en todas las dependencias municipales incluido los mercados y proporcionarle, en el caso que no lo traiga, mascarilla quirúrgica y guantes que deberían ser obligarías dentro de las dependencias municipales y sobre todo en las que tienen gran afluencia de público o se manipulan alimentos, tanto para empleados públicos, como para usuarios. Medidas que habitualmente viven empresas pequeñas y privadas y en cambio, no en la pública donde se debe dar ejemplo.

CSIF, seguirá denunciando, a día de hoy, no se han solventado dichos problemas cuando deberían haberse hecho antes de la reincorporación del personal.

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