Las leyes, el camino de la democracia y la soberanía nacional van a permitir que el nuevo Gobierno inicie su andadura. Una vez finalizado el debate de investidura donde el presidente del Gobierno ha sido investido con toda la legitimidad, pese a quien le pese, nuestro país puede mirar el horizonte con más tranquilidad y seguridad. Inmediatamente vamos a comprobar cómo toda la maquinaria del Estado va a concentrar todas las energías en ponerse manos a la obra para continuar resolviendo los problemas de la ciudadanía.

En esta ocasión vamos a estrenar un Gobierno de coalición por primera vez en nuestra democracia. Va a suponer la suma entre lo mejor de las dos formaciones políticas que lo conforman, el PSOE y Unidas Podemos, con ministras y ministros que tienen acreditado un elevado nivel político y técnico. Entramos en una nueva fase donde la ilusión y la esperanza van acompañar a cada decisión que se adopte en el Consejo de Ministros. Esperemos ir verificándolo y comprobar que la política no está para crear problemas, sino para favorecer que podamos vivir mejor. Después del seguimiento y análisis de las sesiones de investidura me voy a detener en algunos aspectos que posiblemente estén en el centro de atención de este nuevo Gobierno.

EL DIÁLOGO

“La ley es la condición y el diálogo es el camino”, son palabras del presidente del Gobierno que dejan claro el marco donde se va a desarrollar la política. Con la finalidad de que la convivencia se favorezca en todos los ámbitos y se consigan resultados. En nuestro país no sobra nadie y no se consideran enemigos a las personas, los enemigos son la injusticia, el odio y el fanatismo.

El diálogo se tiene que desarrollar entre las organizaciones políticas que conforman el Gobierno, también con el resto de fuerzas políticas que están representadas en el Parlamento, en el ámbito territorial del Estado, con las organizaciones sociales y por supuesto en la calle y en las empresas. Un camino de diálogo que sea constante, generoso, paciente y con templanza, donde se escuche y predomine el espíritu de encuentro y constructivo. No se trata de aniquilar al contrario o al diferente, sino de construir para que España avance. Se producirán dificultades, pues el conflicto está inherente en el desarrollo de la vida; pero lo importante es trabajar para superarlo.

 El diálogo, la negociación, la construcción de puentes y el pacto amparado por la Constitución pueden contribuir a que algunos de nuestras dificultades más significativas entren en vías de solución. El Pacto de Toledo con las pensiones, el tema de la educación, la financiación y redistribución económica de las diversas Comunidades Autónomas, la Conferencia de Presidentes de estas entidades, la superación de la situación de Cataluña…  

ALGUNAS TRANSFORMACIONES QUE AVANZARÁN EN JUSTICIA SOCIAL

Ninguno de los diez ejes que mencionó el presidente del Gobierno para la transformación del país debe desgajarse del resto; no obstante, por razones de espacio señalaré solo algunos de ellos. En primer lugar, el crecimiento económico y la justicia fiscal.  Todas las medidas que se adopten tienen que traducirse en la mejora del empleo y garantizar trabajos dignos. Para ello se tiene que actuar en el diálogo social, la productividad, adaptar la formación a la economía del siglo XXI con especial atención a la Formación Profesional donde se van a crear 200.000 plazas con nuevas titulaciones actualizadas, la mejora de políticas activas de empleo y la intervención en el paro de larga duración. Serán importantes también las equiparaciones salariales de las mujeres, así como la continuidad en la equiparación salarial de la Policía y la Guardia Civil, sin olvidar la necesidad de reforzar los servicios públicos.

Respecto a la Justicia Fiscal subrayo la defensa de la economía verde, las medidas para combatir el fraude y tratar que la presión fiscal no afecte a las clases medias y trabajadoras, donde se proteja la reducción fiscal a las PYMES. En definitiva, que el incremento fiscal afecte más a las grandes corporaciones y a las rentas superiores a los 130.000 euros.

Otro de los ejes fundamentales de transformación es el relacionado con la protección social. La Educación, la Sanidad y los Servicios Sociales tienen lugar preferente por su propia denominación.  Solo algunos detalles de cada uno. Incremento de los recursos públicos en Educación al 5 % del PIB en 2025 que facilite los recursos para becas, plazas, infraestructuras y profesorado. Blindaje de la Educación Pública con actuación frente al abandono escolar, potenciar el apoyo educativo y la gratitud real y efectiva. Universalización progresiva de la educación de 0 a 3 años, pues la Educación es el medio más importante para compensar la desigualdad social, desarrollar la libertad y preparar a las generaciones jóvenes para el empleo.  La LOMCE será derogada.

En Sanidad se incrementarán los recursos al 7 % del PIB en 2022.  Se van a eliminar los copagos comenzando por los pensionistas contemplándose la introducción de la salud bucodental progresiva. Avanzando en el marco de la atención primaria con las mejoras de condiciones de todo el personal técnico, donde se contemplarán programas de retorno a los que se tuvieron que marchar del país. Por lo que respecta a los Servicios Sociales un tema básico será el de las Pensiones con un nuevo Pacto de Toledo y la actualización al IPC. Neutralizar la pobreza y el acceso de la vivienda serán aspectos notables también en este ámbito.

Se podría hablar también del impulso a la industria, las PYMES, al sector primario, la transición ecológica… No quiero dejar de mencionar que este Gobierno caminará con Europa y que con su actuación estimo que va a devolver la fe en la política. Por supuesto, tal como ha manifestado el secretario general del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández, este Gobierno de Coalición del PSOE y Unidas Podemos va a beneficiar a Ceuta.

 Con total legitimidad durante esta legislatura el Presidente, Pedro Sánchez dirigirá un Gobierno con plena unidad dentro de la pluralidad y en una dirección, aunque pueda haber varias voces, pero con una misma palabra. Va a impulsar lo más progresista que es avanzar y dialogar, tal como ha subrayado, y aplicando un método resuelto y ejecutivo.