El rey Felipe VI ha seguido el protocolo que otros no parecen entender

EFE

En la toma de posesión del presidente de Colombia, Gustavo Petro, el rey Felipe VI, ha seguido el protocolo, lo mismo que hizo el presidente de Argentina, de no levantarse al paso de la espada (sable) de Simón Bolívar, porque no es ningún símbolo nacional, es como si aquí en España quitásemos delante del rey de Marruecos la espada del Cid y el alauita le tuviese que mostrar respeto. O también, no mostrárselo a la bandera americana por echarnos de Florida, y ayudar a expulsarnos de Cuba y Filipinas o poner fin en 1819 al virreinato de Nueva España.

El presidente Gustavo Petro se refirió a la espada:

“No como un símbolo de guerra, sino, como dijo su propietario, que sólo se debería envainar cuando haya Justicia en Colombia”.

La guerrilla del M-19, a la que perteneció el recién nombrado presidente Preto, en 1974 robaron la espada en la casa museo Quinta Bolívar. Después de 16 años, se devolvió al Gobierno tras firmar dejar las armas. El expresidente Iván Duque, opositor de Petro, había rehusado cederla para el acto ceremonial.

Pero las críticas al monarca no tardaron en llegar de la mano de miembros carismáticos en el Congreso de Podemos, empezando por el trasnochado podemita, Pedro Honrubia, que escupió odio diciendo:

“Alerta, alerta, alerta que camina la espada de Bolívar por América Latina. Y si a Felipe el facha le molesta, pues que le den por saco. Lo que se echa de menos una buena guillotina en la historia del estado español, joer”.

Y después encima, para darle la vuelta a la tortilla, lo remata poniéndose de un chulo barriobajero grotesco, impertinente y faltón:

“Ni idea de en qué estercolero fascista han difundido el tuit para que se me llene esto de vasallos ofendiditos que no saben ni leer un tuit. Pero a ver, ‘señoros’, que el sitio de lamerle las botas al Rey facha no es aquí. Circulen”.

Lo de “Alerta, alerta, alerta que camina la espada de Bolívar por América Latina”, fue coreado por la multitud durante la ceremonia, lema que aprovecha Honrubia para hacer su alegato.

Pero si alguien faltaba y tardaba en salir a la palestra era Ione Belarra, la cual dijo:

“La espada de Bolívar representa la soberanía de Latinoamérica. El rey Felipe VI ha sido el único jefe de Estado que ha permanecido sentado a su paso en la toma de posesión del nuevo Presidente de Colombia. Una falta de respeto grave que requiere disculpas de parte de nuestro país”.

Pues bien, lo de Monedero, tampoco tiene desperdicio:

“Los generales valientes, aún cuando son derrotados, rinden homenaje a los que les han vencido en buena lid. Que el Rey Felipe VI se quede sentado cuando todo el pueblo decente de Colombia vibra de pie cuando llega la espada de Bolívar es triste. Respeto”.

Éramos pocos…, y el diputado de ERC en el Congreso, Jordi Salvador, lo califica como un episodio “lamentable”, cayendo en el insulto zasca que:

“Es un impresentable digno heredero de muchos impresentables. Un hombre que ha renunciado a ser persona por ser un digno sucesor de una monarquía golpista, corrupta y profascista”.

Pero todo no acaba ahí, también hubo diatribas por parte del presidente del Perú, Pedro Castillo, que manifestó:

"Durante cuatro milenios y medio nuestros antepasados encontraron maneras de convivir en armonía con la rica naturaleza que la providencia los ofrecía. Fue así hasta que llegaron los hombres de Castilla, que con la ayuda de múltiples Felipillos y aprovechando un momento de caos y desunión lograron conquistar al Estado que hasta ese momento dominaba gran parte de los Andes centrales".