El novelista Francisco Sánchez Bandrés regresa con ‘Leyendas de Tamora’

Francisco Sánchez Bandrés

Una novela hilarante en la que los personajes son llevados al extremo desde un punto de vista cómico, para ver como son capaces de resolver las más extrañas situaciones.

 
 
  • No ha pasado un año desde la publicación de ‘Una oveja para Trebopala’, novela sobre romanos y celtíberos: Viriato, Escipión, Numancia y los druidas, que el escritor Francisco Sánchez Bandrés regresa con ‘Leyendas de Tamora’, una novela hilarante en la que los personajes son llevados al extremo desde un punto de vista cómico, para ver como son capaces de resolver las más extrañas situaciones.

    No hay excusa para no leerla, pues ‘Leyendas de Tamora’ va a tener una repercusión mediática superior a ‘Una oveja para Trebopala’. Esta obra editada por el Grupo Planeta no llega a los 4 euros y se puede conseguir en Amazon, Fnac, El Corte Inglés y La Casa del Libro.

    ‘Leyendas de Tamora’

    Entorno físico        

    La isla de Tamora es un enclave privilegiado, sito en algún lugar perdido del Mediterráneo. Un Paraíso primaveral poblado por personajes de castas diferentes -neohippies soñadores, lugareños despiertos, buscavidas de todos los continentes- gustosas de vivir y dejar vivir a los otros habitantes de la isla, mientras puedan.

    Entorno cultural

    Tras la muerte de Cristo no abunda lo sobrehumano, pero tampoco hemos retrocedido al estadio de antes de su nacimiento y no vemos a la gente haciendo colas para asistir a sacrificios sangrientos los fines de semana. El neohippie de Tamora, no obstante, gusta -necesita- de trascendencias y crea sus propios dioses -a veces demasiado fieles a su imagen y semejanza- y no desdeña la ayuda de psicotrópicos para buscarlos.

    Narradores y protagonistas

    Tom y Daniel, dos pícaros del siglo XXI, aparecen dispuestos a prosperar en este microcosmos.

    Partes de la novela:

    Primera parte: “La isla de los chiflados”: Tomás Wolf explica sus experiencias en Tamora -se enamorará, se desesperará, se desarrollará- tras conocer al que será su amigo, jefe y mentor Daniel Zondervan.

    Segunda parte: “Un hombre sin apellido”. Daniel Zondervan relata en primera persona las particulares experiencias físicas y mentales que acabaron llevándole a la isla de los chiflados.

    ‘Leyendas de Tamora’ es una metáfora, una caricatura y un divertimento intelectual plagado de aventuras; es una novela para el Siglo XXI: ágil, contundente y bienhumorada.  

    Una novela picaresca para el siglo XXI 

    El autor nos comenta que no se trata de una novela histórica y quizás nos sorprenda, pero eso es porque en su momento no confesó la verdad, porque no es historiador, ni siquiera filósofo, tampoco es poeta. SB Francisco es novelista y le interesa todo, pero en la medida en que afecta a los personajes.

    Para SB Francisco el ser humano es el mismo ahora que hace dos mil años, sin embargo, ya no sentimos la necesidad de ofrendar sacrificios humanos a ningún dios. Menos aún en Tamora. “Si a los tamoranos, gente que se gusta evolucionadísima, se les antoja inventarse uno -quizá para ligarse a una neohippi muy mística- dan un soplido, lo crean -son gente muy creativa- y lo disfrazan con los atributos más seductores para la ocasión”, reseña el novelista.

    Las dos partes en que está dividida la novela están escritas en primera persona por sendos narradores, pero en ninguno de los casos SB Francisco es uno de ellos. Tamora se dibuja en un junio perpetuo con playas blancas y aguas transparentes, pero sus protagonistas están chiflados: se comportan como chiflados y, el novelista destaca que, “escriben como chiflados. Es decir, van más allá de la razón. Debo apuntar que muchas veces con la ayuda de psicotrópicos, lo que también forma parte de la novela, sin dejar de ser un truco con el que dotar al ser humano de más dimensiones que la meramente racional para intentar explicarlo”.

    Digamos que las Leyendas de Tamora transitan un palmo por encima de la realidad. Es el entorno que les conviene, según el autor que se pone como juez, se da la feliz circunstancia de que esto las haga muy divertidas. “Que los narradores sean dos pícaros del siglo XXI no va en contra de esta calificación”, puntualiza SB Francisco el cual añade, “en cualquier caso, aquí tiene la palma de mi mano. Chóquela con la suya y pase a conocer a los tamoranos. Queda cordialmente invitado a la isla”.

    Conociendo al autor:

    Francisco Sánchez Bandrés, cuando no está escribiendo novelas es publicitario, economista o agente de viajes. Otras veces es profesor de educación física y monitor de esquí e instructor de yoga; y también es marinero, músico, buzo o criador de pulpos salvajes. Esporádicamente, incluso logra el nivel de subsistencia como periodista.

    Nacido en la noche más corta de 1962, cuando firma como SB Francisco se convierte en un guerrero lusitano y un monje medieval y un hippie atribulado y un ejecutivo taciturno y en el capitán de un barco fantasma y en muchos otros personajes con desigual destreza para presentarse en público.

    Si le preguntan con qué personalidad se siente más identificado puede que les conteste que con el criador de pulpos salvajes, pero no es verdad.

    Por qué leer ‘Leyendas de Tamora’:

    Es una novela hilarante en la que los personajes son llevados al extremo desde un punto de vista cómico, para ver como son capaces de resolver las más extrañas situaciones.

    La sátira y el humor son unos géneros difíciles en general y requieren de gran destreza narrativa, cosa que el autor de ‘Leyendas de Tamora’ maneja muy bien y con un tono provocador.

    S.B. Francisco logra dejar claro los referentes de la realidad sin, en ningún momento, mencionarlos, haciendo que el lector pueda situarse con facilidad sin necesidad de amplias descripciones que frenarían el ritmo de la narración, haciendo el conjunto mucho más atractivo.

    Los lectores que disfruten con obras como las de Tom Sharpe, David Safier y Douglas Adams incluso con provocación de Timus Vermes en ‘Ha vuelto’, también se verán seducidos por esta obra que enfrenta la realidad con desenfado y humor.

    La obra tiene un planteamiento absolutamente original en una historia cuyo ritmo va in crescendo y arrastra al lector hasta el final con facilidad.