La diputada Hikmat Mohamed ha dado plantón a sus compañeros del Grupo Parlamentario Socialista al abandonar el GPS para integrarse como no adscrita en la Asamblea. Lo hizo sin avisar, ni al partido ni al grupo, pese a haber compartido con ellos los últimos tres plenos.

El PSOE de Ceuta no esconde su enfado. Considera la decisión una deslealtad en un momento clave de reconstrucción interna, con una Ejecutiva recién elegida y una hoja de ruta marcada por la renovación y la cercanía a la calle.

En Daoiz hablan de "proyecto colectivo", pero también de exigencia. Lo que callan lo refleja el gesto: Mohamed se va sin dar explicaciones y el PSOE opta por repetir el mismo mensaje de unidad.

En cualquier caso, los socialistas aseguran que no se desviarán del rumbo trazado. Reafirman su compromiso con una oposición "firme, responsable y útil", aunque la marcha de una diputada complique aún más la frágil estructura del grupo.