Cuando finaliza la dictadura franquista entran en la escena de la vida de nuestro país dos palabras fundamentales: democracia y política. La Constitución las convierte en pilares básicos, junto al resto de títulos que la conforman. Ya en la antigua Grecia, cuando surgen las polis - ciudades-estado -, la política adquiere relevancia entre algunos destacados filósofos, como Platón y Aristóteles. Gracias a la política y la democracia, en España se han producido avances y cambios históricos.

Desde el inicio de la transición, con la llegada de la democracia, la política y los partidos políticos son acogidos con ilusión y esperanza por una amplia mayoría de la población. Sin embargo, no se puede ocultar que últimamente se ha producido una desafección y un descrédito ante la opinión pública. Ahora bien, el alejamiento de la política solo favorece a quienes tienen la vida resuelta. Para el ciudadano normal, además de por su esfuerzo, el cambio y la mejora social viene como consecuencia del contexto político del país y de la Comunidad o ciudad donde vive.

Si la política es cercana, si atiende a los verdaderos problemas de la ciudadanía, si es ejemplar y no se queda únicamente en la propaganda, la política tiene una importante función. Democracia y política son palabras que van de la mano e insustituibles en un país moderno y democrático.

Si abrimos el libro de la Constitución y leemos sus artículos, todo en su conjunto tiene que ver con la política. Por supuesto, es el marco legal que determina la base de nuestro ordenamiento jurídico. Artículos determinantes con la ciudadanía y la política, a mi modo de entender son: El Preámbulo, el art 1.1 respecto al pluralismo político; el artículo 6 sobre lo que son los partidos políticos y el art. 9.2 referente a la participación de los ciudadanos en la vida política. El resto también tiene que ver sobre aspectos vitales de participación y funcionamiento constitucional.

Sin partidos políticos y sin políticos la democracia no podría funcionar. Son los que canalizan los programas, proyectos o propuestas con los que pretenden gobernar. Es fundamental su proximidad a la problemática de la sociedad. Me parece importante el respeto al criterio de la ciudadanía y pienso que no deja de cometerse un grave error por algunas organizaciones políticas, pues olvidan la libertad intelectual individual. Algo que era más propio de nuestro reciente pasado no democrático.

No basta mencionar los problemas, se necesita credibilidad y se tiene que demostrar con hechos. La coherencia entre lo que se promete y lo que se ha realizado termina por saberse. Es importante el proceder. Pienso que la cercanía se demuestra no solo con el saludo, aunque sea importante, sino en cómo se responde por la forma de gobernar o con los argumentos y el trabajo del que está en la oposición aunque no gobierna.

Estimo que durante esta legislatura, el Partido Socialista ha realizado esfuerzos para contactar con la realidad de la ciudad. Ha dialogado, evaluado las necesidades y contrastado las opiniones de vecinas y vecinos en las barriadas; sin embargo, el Gobierno continúa más preocupado por la Gran Vía. La política cercana fortalece a la ciudadanía, pero todos los barrios necesitan fortalecerse, algo que según mi opinión no sucede en nuestra ciudad. Afortunadamente, Manuel Hernández y todo el Partido Socialista de Ceuta tienen un proyecto para cambiar Ceuta, algo que se ha demostrado en el reciente debate de los Presupuestos de la ciudad.

Hace unos días el PSOE inauguró una nueva sede en el barrio de Hadú. Pienso que responde a la necesidad de abrir las puertas y ventanas para la política española, que está impulsando el presidente del Gobierno y que practica con iniciativa y coordinación esta organización política en Ceuta. La ilusión y el entusiasmo en la apertura desbordaron la asistencia, porque eso significa para la militancia y simpatizantes la posibilidad de: escuchar, dialogar, conocer y mirar más de cerca los problemas, pero también con humildad poder ayudar y servir a la ciudadanía. Dos aspectos serán importantes, utilizar la palabra para hacer pedagogía y generar confianza en la política.

No quiero terminar sin mencionar el problema grave de un vecino de Hadú, Abdelmalik, que será desahuciado mientras está ingresado en el hospital, con problemas de discapacidad y que ha tenido dificultades para adquirir medicamentos a una de sus hijas menor de edad, tal como publica “La Verdad de Ceuta”. El Partido Socialista ha reaccionado con indignación y sin resignarse, por la actuación de la Atención Social del Gobierno de la ciudad. Yamaldin Mohamed, secretario del área de Movimientos Sociales y Diversidad del PSOE, manifiesta que muchos ciudadanos de Hadú reivindican una evaluación integral de todo lo que acontece en Asuntos Sociales, a su vez, muchos vecinos del barrio del Príncipe han trasladado su malestar sobre dichas dependencias. Por su parte, Manuel Hernández reclama más implicación con las personas en exclusión social, pues el caso de Abdelmalik es la vergüenza inmediata de la falta de previsión de todo un Gobierno.

La política está para encontrar salidas, con generosidad, honestidad, transparencia y buscando exclusivamente el servicio a los demás. Para transformar la sociedad y que se promueva lo que dice el preámbulo de nuestra Constitución para España: Garantizar, consolidar, proteger, promover y establecer, entre otros aspectos, el progreso de la cultura y de la economía para asegurar a todos una digna calidad de vida.