Policía Nacional ha resuelto el homicidio de una mujer hallada muerta y mutilada en Marbella, arrestando a dos personas. La primera, Leonel Herrera expareja sentimental de la víctima Natalia Mosquera ambos de origen colombiano, como presunto autor material y confeso de su participación en el crimen. El segundo, presunto coautor del mismo.

La Policía ha realizado una reconstrucción de los hechos en un enclave de la costa marbellí, donde según declaraciones del autor de 45 años sesgó la vida de su expareja de 46 y arrojó su cuerpo mutilado al mar.

El coautor, amigo del principal investigado, condujo supuestamente a este y a la víctima, aún con vida, en una furgoneta (intervenida en Madrid) al lugar del homicidio.

Denuncia de la familia

La investigación se inició a partir de una denuncia familiar, exponiendo que la víctima había recibido amenazas por teléfono días atrás por su expareja sentimental, el que, habría quebrantando una orden de alejamiento de 16 meses.

Horas antes de la interposición de la denuncia, el cadáver mutilado de la mujer, fue hallado por unos ciudadanos en una playa de Marbella.

Localización del principal sospechoso

La investigación se inició a partir de una denuncia familiar, exponiendo que la víctima había recibido amenazas por teléfono días atrás por su expareja sentimental, el que, habría quebrantando una orden de alejamiento de 16 meses.

Horas antes de la interposición de la denuncia, el cadáver mutilado de la mujer, fue hallado por unos ciudadanos en una playa de Marbella.

Localización del principal sospechoso

El primer paso de la Policía fue detener al principal sospechoso por un delito de quebrantamiento de condena.

Registrados sendos domicilios en Marbella del sospechoso y la mujer, se intervinieron una radial y efectos de interés para la investigación. Las pesquisas situaban a la víctima y a su expareja en un mismo punto de la ciudad.

La víctima y el detenido habían mantenido una relación sentimental de unos cinco meses y la mujer decidió poner fin a la misma por un episodio de malos tratos, fecha en la que comenzaron los problemas, los cuales, habían sido objeto de denuncia por acoso.

Las indagaciones permitieron detener al amigo del principal sospechoso, por su presunta participación, puesto que, el día del crimen, supuestamente trasladó en una furgoneta a la víctima aún con vida, y a la expareja de esta a un enclave de la playa donde tendría lugar el crimen.

El principal investigado se ha derrumbado confesado el crimen, siendo puesto a disposición judicial. La investigación declarada secreto de sumario está pendiente de las pruebas de ADN, así como de la búsqueda de restos cadavéricos (cabeza y manos).